sábado, 13 de abril de 2013

Síndrome de Korsakoff



El Síndrome de Korsakoff es una de las tantas consecuencias negativas que tiene el alcoholismo crónico. Se trata de un conjunto de síntomas que se caracteriza por un estado de confusión, dificultades para incorporar aprendizajes nuevos y para en evocar recuerdos. Se trata de una amnesia a medida, se olvida a medida que pasa el tiempo. A continuación te presentaremos, cómo detectar el Síndrome de Korsakoff.

Estado de confusión. La persona que padece del síndrome de Korsakoff comienza con dolores de cabeza, trastornos en el humor y en el sueño. También, es común, la sensación de hormigueo y adormecimiento de las piernas.

Se distrae fácilmente. En un principio la falta de atención se hace notoria, hay que repetirle las cosas varias veces.

Memoria de fijación afectada. Tiene dificultades para recordar hechos que sucedieron hace un breve lapso de tiempo. Se trata de una alteración en la capacidad de recordar hechos acontecidos luego de instalado el síndrome.

Permanencia de memoria afectiva. Todo aquello que haya acontecido previo a la instalación del síndrome se encuentra menos afectado. Sin embargo, se va perdiendo a medida que pasa el tiempo.

Desorientación temporal. Los sucesos actuales para él nunca sucedieron.
La inteligencia permanece intacta, pero no tiene conciencia de lo que sucede.
Fabulaciones. Suele relatar cosas que le pasaron fuera del contexto espacio- temporal. No inventa los acontecimientos, sino que no mantiene una coherencia en el orden del tiempo y espacio.

No afecta la identidad de la persona. La persona no se olvida de quién es, ni de quién es su familia.

Características Neurosipsicológicas: Estos pacientes pueden proporcionar recuerdos autobiográficos ocurridos muchos años atrás (en su infancia o adolescencia) Pero tendrían una seria limitación para evocar sucesos ocurridos recientemente (horas o días antes).
La persona afectada tendría una gran dificultad para aprender o recordar palabras nuevas.
Las características neuropsicológicas de este síndrome no están enfocadas sólo a un problema de amnesia, existiendo también alteraciones en la parte afectiva (afecto aplanado) o en la capacidad de impulso o motivación para aprender nuevas actividades.
Este síndrome suele presentarse tras años de consumo abusivo de alcohol.

El tratamiento: Se basa en el control de los síntomas aunque está demencia se puede trabajar para evitar el progreso de la enfermedad.

Si conoce a alguien que padezca de este Síndrome, consulte con un médico especialista para un adecuado tratamiento.

martes, 9 de abril de 2013

Instantes






Si pudiera vivir nuevamente mi vida,
en la próxima, trataría de cometer más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido,
de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad.
Sería menos higiénico.
Correría más riesgos,
haría más viajes,
contemplaría más atardeceres,
subiría más montañas, nadaría más ríos.
Iría a más lugares adonde nunca he ido,
comería más helados y menos habas,
tendría más problemas reales y menos imaginarios.

Yo fui una de esas personas que vivió sensata
y prolíficamente cada minuto de su vida;
claro que tuve momentos de alegría.
Pero si pudiera volver atrás trataría
de tener solamente buenos momentos.

Por si no lo saben, de eso está hecha la vida,
sólo de momentos; no te pierdas el ahora.

Yo era uno de esos que nunca
iban a ninguna parte sin un termómetro,
una bolsa de agua caliente,
un paraguas y un paracaídas;
si pudiera volver a vivir, viajaría más liviano.

Si pudiera volver a vivir
comenzaría a andar descalzo a principios
de la primavera
y seguiría descalzo hasta concluir el otoño.
Daría más vueltas en calesita,
contemplaría más amaneceres,
y jugaría con más niños,
si tuviera otra vez vida por delante.

Pero ya ven, tengo 85 años...
y sé que me estoy muriendo.


Jorge Luís Borges


Debemos permitirnos más cosas, vivir el hoy el ahora, sin culpas, liberarse, en definitiva tratar de ser feliz disfrutar la vida.

martes, 2 de abril de 2013

Desamor



Cuando estamos enfermos y nos  duele la cabeza acudimos al médico con el objetivo de que nos  recete un medicamento para aliviarnos las molestias de una forma urgente. ¿Sin embargo, qué sucede cuando nos  duele el corazón y el alma como consecuencia de un desamor? En este sentido, nuestro corazón también puede necesitar de un tiempo de reposo desde un punto de vista metafórico.

Se trata de un proceso de debilidad en donde nos sentiríamos incapaces de amar a otra persona de nuevo, pensaríamos que nunca más volveríamos a enamorarnos, o incluso, puede que nos pase por la cabeza la idea que nadie volverá a fijarse en nosotros. Está claro que se trata de pensamientos que son fruto de la negatividad, de la rabia, de la tristeza y del dolor. Un dolor que es más intenso en caso de que nos hayan recientemente abandonado.

Los remedios para el desamor son los siguientes:

1) En primer lugar, debemos permitirnos vivir el dolor, llorar, expresar la rabia. Una buena opción es la de escribir en un diario todos nuestros pensamientos. Por supuesto, también podemos hablar con alguien de confianza sobre cómo nos sentimos.

2) Cuidarnos  a nosotros mismos, descansar más, dar más tiempo, disfrutar de un baño relajante, disfrutar con un programa de televisión, darnos todo el placer que se pueda y hacernos la vida agradable.

3) Evitar pensar en exceso en el futuro, es decir, centrarte en el presente. Olvidarse el pasado y no recrear una y mil veces la tragedia. Asumir los acontecimientos tal y como han pasado, aunque nos duela.

4) Pensar en todas aquellas situaciones difíciles que hemos superado en toda nuestra vida. Así seremos  conscientes de nuestra fuerza y valor. Tal vez no sea la primera vez que vivamos un desamor. En caso de ser así, analicemos qué es lo que nos hizo afrontar este momento de nuestra vida.

5) Evitemos escuchar música especialmente melancólica. No concurrir al cine para ver películas románticas. Salir de casa con amigos aunque no te tengas ganas. Debemos forzarnos a nosotros  mismos por llevar una vida normal.

6) En el mercado existen muchos libros de autoayuda, por ello, merece la pena que consultemos la biblioteca más cercana para leer algún título sobre autoestima, bienestar, superación personal y felicidad. Nunca es tarde para empezar de nuevo, así que no miremos hacia atrás y caminemos con paso firme hacia el futuro. Mucha suerte y no dejemos de sonreír. Cuando estemos preparados para volver a buscar pareja no debemos reducir nuestra felicidad a la situación sentimental. Simplemente, debemos sentirnos bien en base a las circunstancias.
¡¡¡¡Buena vida!!!!!